El 10 de enero de 1880 nació, en Alcalá de Henares (Madrid), quien sería abogado, escritor y último presidente de la Segunda República antes de la guerra, Manuel Azaña.
Miembro de una familia acomodada, se trasladó a Madrid para realizar sus estudios de Derecho en la capital pero comenzó a trabajar como periodista y colaborador en revistas literarias para dar rienda suelta a su verdadera vocación, la escritura. En 1926 ganaría el Premio Nacional de Literatura y publicaría tanto novelas (El jardín de los frailes) como obras dramáticas (La velada en Benicarló). Siendo considerado un verdadero intelectual y uno de los mejores oradores de su tiempo, Azaña entró en política en el Partido Reformista pero acabó fundando Acción Republicana y, más tarde, Izquierda Republicana.
Desde la proclamación de la Segunda República, Azaña fue ministro de la Guerra, dos veces presidente del Gobierno y presidente de la República desde el 11 de mayo de 1936 hasta el golpe de Estado militar de julio de ese año y el estallido de la Guerra Civil. En el 39 presentó su denuncia y abandonó España hacia el exilio, permaneciendo en Francia hasta su muerte en noviembre de 1940. Su figura y recuerdo fue demonizado y ridiculizado por el franquismo.